Realizar una consulta para saber el futuro de otra persona es algo que debe ser tomado muy en serio puesto que se ponen en juego los sentimientos de una persona y eso algo que debe ser sagrado.
Conseguir predecir que es lo que va a ocurrirle a alguien requiere de tranquilidad, de poseer el don de la videncia y de saber utilizar cualquier arte adivinatorio. Todo esto sólo es posible si se trata de una vidente particular sin gabinete y te vamos a explicar el motivo de esta afirmación.
Lo primero a tener en cuenta a la hora de llamar a un tarot es que quien te va a tender sea una vidente verdadera y que realmente posea ese don natural.
Después hay que valorar que esta realice la consulta desde su casa, que sea una vidente particular y que por tanto no atienda desde un gabinete donde se encuentra junto con otras personas atendiendo las llamadas en serie.
Cumpliendo estos dos requisitos debemos tener en cuenta que el grado de fiabilidad varias de una vidente a otra y esto solo podemos comprobar si conocemos de primera mano a otras personas que ya han consultado con ella.
No valen las opiniones que podemos encontrar por internet debido a que la gran mayoría de ella son meras reseñas publicitarias colocadas por las propias videntes o las empresas que se dedican a ello.
Una buena vidente particular sin gabinete tendrá llamadas y consultas sin necesidad de hacer publicidad, ya que su mayor activo será el boca a boca de las personas que han quedado satisfechas después de haber realizado una consulta.
Si se le acierta a una persona esta probablemente se lo cuenta a las personas de su entorno y eso es una cadena que vale mucho más que cualquier campaña de publicidad en donde además usan reclamos indicando que atienden sin gabinete.
La sinceridad y la honradez deben de ser dos de las virtudes más preciadas de quienes se dedican a realizar consultas para predecir el futuro.
No abundan mucho y en esto es lo que se diferencia a la clarividente que te estamos presentando en esta web. Y lo decimos porque son tantos años de aciertos y de personas satisfechas que hacen posible esta afirmación.
Nunca te va a engañar con falsas esperanzas y con predicciones que mas que certezas sobre tu futuro son tus deseos.
Es que es muy fácil, sin necesidad de ser vidente sin gabinete, conocer que es lo que desea la persona que llama.
Por ejemplo, si lo hace preguntando por una persona con la que no tiene una relación sentimental en estos momentos puede ser por dos causas. O bien la han abandonado o está en ese proceso de conquista.
En ambos casos el deseo de la consultante es que vuelva con ella o que definitivamente la otra persona se decida a dar el paso y mantener una relación plena y feliz.
Si le dices eso seguro que termina la consulta muy contenta y probablemente te vuelva a llamar puesto que sigue a la espera de que suceda ese acontecimiento que nunca ocurrirá
Si, vas a ganar dinero, pero estarás faltando a la verdad y no serás una vidente sincera y honrada que es lo primero que hay que ser cuando se trata de decirle el futuro a alguien preocupada por el mismo.
Por regla general la videntes particulares sin gabinete suelen ser honestas y no caen en esa trampa puesto que a la larga les va a resultar más beneficioso decir la verdad y que sean sus propios clientes quien la recomienden.
En el caso de nuestra clarividente es la manera que tiene de actuar porque para ella lo primero es quien la llama y el poder dormir tranquila por la noche sabiendo que ha ayudado a otras personas a aclarar sus ideas.
Al contrario de lo que sucede en los gabinetes de tarot, las videntes particulares no están tan presionadas a la hora de obtener resultados. Nos estamos refiriendo a resultados económicos.
Ellas se pueden permitir ir creando una base de clientes en base a sus aciertos y a su sinceridad.
Son dos conceptos diferentes. Mientras las videntes particulares sin gabinete no trabajan para ninguna empresa que las presiona, las otras deben de ser rentables al máximo.
Es por todo ello que las videntes de verdad nunca trabajan en un gabinete porque sencillamente sería imposible y no lo necesitan.
El consejo es que siempre llames a aquellas que si bien pueden tener a una persona atendiendo la llamada mientras está en consulta, no se encuentran en uno de esos lugares a modo de centro de atención al cliente de una compañía telefónica.
Laura es una vidente que lleva ya bastante tiempo realizando consultas desde su casa por medio del teléfono y que no te va a mentir en sus predicciones con tal de que quedes contenta.
Solo la verdad, lo que le salga en las cartas, y lo mas importante lo que le venga de videncia cuando trata contigo y se concentra en tu problema o inquietud.
Lógicamente no atiende con un gabinete al tratarse de una vidente particular y puedes confiar en ella debido a su sinceridad y honrada.
Todo esto lo vas a poder comprobar desde el inicio de la conversación porque te va a transmitir la confianza necesaria para que sepas que estas tratando con alguien que de verdad es lo que afirma ser.